Un grupo de organizaciones no gubernamentales de Gualeguaychú, junto a Agmer y la dirección de Ambiente municipal conformaron la Mesa de Defensa de las Escuelas Rurales en riesgo de ser fumigadas. Objetivos y primeros pasos a dar.
Rubén Skubij
En la sede de Agmer Gualeguaychú, con la presencia de integrantes de la Asamblea Ambiental y Fundavida, se coincidió en constituir un espacio que construya las herramientas para difundir, acompañar, concientizar y denunciar la problemática por las que atraviesan los establecimientos ubicados en el campo.
Diego Sánchez, secretario General de Agmer, informó a El Día que el tema “lo tomamos en el 2010 donde se hizo un relevamiento. Luego se redactó un expediente que fue de público conocimiento “pidiendo una revisación periódica de los docentes y alumnos expuestos al impacto de agroquímicos. Recorrió distintos estamentos del Estado, fue al Consejo General de Educación, pasó por Salud de la Provincia, se derivó incluso al Hospital de Gualeguaychú y terminó en la ART. Ninguno se hizo cargo de esa situación”, comentó.
Al no haber respuestas, aclaró, “lo tenemos como una de las cuestiones a seguir peleando. Eso fue en los dos años anteriores. En 2012 iniciamos charlas con la gente de Concepción del Uruguay que llevaban adelante la campaña “Paren de Fumigar”. Veíamos la necesidad de armar algo parecido en Gualeguaychú a partir de los antecedentes que ya teníamos”.
- ¿Cuáles, por ejemplo?
Ocurrió lo de la Escuela Nº 66 “Bartolito Mitre”, nos ponemos en contacto con Estela Lemes –su directora-; empezamos a recorrer un camino juntos, acompañando las demandas y viendo las situaciones que se daban en otras escuelas.
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| Ubicación de la Esc. N° 66, a 15 km al sur de Gualeguaychú. Imagen agregada por ONG Ambiente Comarca. |
Finalizando el año se realizó un encuentro con maestras rurales organizada por el CGE y Salud en Gualeguaychú. Creo que fue en el único lugar de Entre Ríos, pedíamos que se hiciera en todos los departamentos.
Allí surgió la idea de conformar una mesa que tome las fumigaciones en el ámbito de las escuelas rurales; cursamos invitación a Dirección Departamental. Hemos hablado con el Vocal del Consejo, Héctor De la Fuente, y Dirección de Medio Ambiente de la Municipalidad de Gualeguaychú porque nos parece que el Estado debe formar parte de esta organización.
Por las responsabilidades que le cabe y porque es el que tiene que llevar adelante las políticas que corresponden. Y dentro de esa mesa estamos también las organizaciones sociales, sindicales, ambientales aportando la mirada y toda la trayectoria.
Son el caso de la Asamblea Ciudadana Ambiental y Fundavida, donde decenas de vecinos están todo el tiempo aportando puntos de vistas y datos en defensa del medio ambiente.
Diego Sánchez consideró que “lo importante fue reunirnos y comunicar a la sociedad que estamos presentes, atentos a los comienzos de la campaña en el campo y el uso de agroquímicos”.
Adelantó que las reuniones se harán todos los miércoles, a las 18, en Agmer. “Vamos a tomar contacto telefónico con los directores de escuelas rurales para que nos cuenten qué pasa en cada lugar, de acuerdo a la problemática haremos una visita”.
17 escuelas
Ese es el número de edificios que fueron fumigados en la zona rural del departamento de un total de 60. “Hay escuelas que en el primer relevamiento que hicimos fueron fumigadas pero el año pasado no tuvieron ese inconveniente dado que el dueño del campo se pasó de la agricultura a la ganadería. Van cambiando las realidades”.
- ¿Cómo compatibilizar la defensa de la gente del lugar con el trabajo?
Es una situación compleja. Necesitamos abrir este espacio para darle el respaldo necesario al docente que está en el campo porque muchos viven en la escuela, otros se trasladan.
En muchos casos sucede que el empleado del campo que está fumigando es papá del chico que va a la escuela. Se establecen situaciones humanas fuertes, para el docente es todo un tema a la hora de plantear la cuestión de los agroquímicos.
Por esto buscamos herramientas para avanzar seria y responsablemente, generar más conciencia y dar una solución de fondo, sin perjudicar a nadie.
El dirigente gremial expresó que Gualeguaychú “es una de las zonas más sojizadas de Entre Ríos. Ante esa realidad, y si además tenemos en cuenta antecedentes de los casos de cáncer del departamento, hay que poner el ojo, estar alertas y empezar a desarrollar algún tipo de acción con respecto a esto. No digo que tenga una cosa relación directa con la otra pero digo que algo está pasando”.
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